Las precisiones del
pensamiento arquitectónico contemporáneo están fundadas en un cuerpo de ideas y supuestos que han
construido una narrativa crítica sustentada en la noción de la crisis de la
modernidad así como de su relato mítico fundante, el “Movimiento Moderno”.
En la actualidad,
pensamiento arquitectónico y pensamiento contemporáneo se entrelazan generando
articulaciones productivas que otorgan su sentido a discursos, argumentaciones
y/o justificaciones que establecen la construcción de una forma de acercarse a
las realidad que solo la arquitectura posee
frente a las disciplinas inter actuantes en el ambiente construido.
Lejos de ser
solamente un hecho fáctico, cuya base empírica se sustancia material y
constructivamente, la disciplina arquitectónica dialécticamente ha definido su
consistencia mediante la relación activa entre los campos: teóricos, históricos
y críticos.
Desde estos tres
campos -inter actuantes entre si-es interpelada la disciplina arquitectónica
generando posicionamientos y perspectivas de pensamiento que normalmente son
funcionales a diferentes formaciones culturales.
Estas formaciones
culturales-tales como las ha entendido Raymond Williams-constituyen la matriz
de valorizaciones estéticas, técnicas y éticas relacionadas con la sociedad
respecto de la que la
Institución arquitectónica interactúa.
Las determinaciones
de la globalización con su incidencia en el mercado y la recualificación de la
disciplina de la ultima década, han resituado a la arquitectura entre la continuidad
de ciertas tradiciones proyectuales racionales de genealogía moderna y la
transformación de la producción de ciertos objetos de diseño en espectáculo.
Las modificaciones de
los substratos ideológico/culturales ha replanteado la problemática hegemónica
de fines de siglo XX centralmente basada
en la arquitectura como lenguaje a indagaciones vinculadas con el impacto de
las tecnologías digitales orientadas
hacia una nueva racionalidad enlazada
con las emergentes problemáticas ambientales y socio-culturales.
Concepciones
generales de la arquitectura, sujetos productores y pro-activos de la misma, se
han modificado conforme a estrategias de posicionamiento frente a contextos
locales o internacionales, donde se ha incentivado el diseño de avanzada
orientado hacia la innovación, la invención y la optimización. En definitiva de
alguna manera la imaginación proyectual se ha potenciado sustancialmente.
Conceptual y
operativamente la identificación de las alternativas teóricas de diseño
avanzado se han situado en coordenadas articuladas con el poder, con
las posiciones
filosóficas del pensamiento contemporáneo mas relevantes, con una programática
interpelada por los drásticos cambios socio/económicos del Periodo, así como por
las mutaciones mas significativas en ciencia, técnica y artes.
En estos últimos
aspectos, la sustitución paradigmática operada mediante un proceso que se
anunció con las revoluciones artísticas, científicas y sociales del siglo XX,
ha generado recientemente posiciones maximalistas y minimalistas frente a las
opciones académico-profesionales, definiendo un conjunto de nuevas designaciones
para diferentes concepciones del diseño.
Ciertamente, la
reformulación critica de la herencia de la trilogía
vitruviana-firmitas-utilitas.venustitas-ha construido un imaginario y formas de
pensamiento arquitectónico dotadas de su propia coherencia interna, en las que
con denominaciones divergentes se ha ido construyendo una constelación de
búsquedas orientadas por el diversificado contrato social de la primera década
del siglo XXI.
Es posible por lo tanto,
hablar de arquitecturas performativas,.diagramaticas y.paramétricas,dando por
supuesto que son el resultado de una serie de procesos relacionados con el
impacto de las teorías de la información desplegados por el paradigma digital.
Pero también por otro
lado, hablar de aquellas arquitecturas que han intensificado su protagonismo
espacial y material desde la búsqueda de un plano de consistencia donde la tectónica
reasuma el papel estructurante de una interioridad disciplinar dispuesta a ser
reformulada críticamente.
Debiera también
hablarse de aquella arquitectura que en sordina han construido ciudad, pero
cuyas estrategias en oportunidades han tenido implicancias territoriales y
regionales.
Particularmente desde
Latinoamérica se han producido recientemente una notoria relectura de los
paradigmas hegemónicos dando lugar a unas manifestaciones de la producción
arquitectónica coherentes con revisadas metodologías y consistentes respecto a
sus adecuaciones contextuales.
Estas constelaciones son presentadas de acuerdo a una cartografía crítica en las que los perfiles
convencionales, de vanguardia y experimentales constituyen un horizonte de
prácticas productoras de sentido socialmente deseable.